
Por: Delio Guerra Ibarra.
En el programa “Colombia tiene talento” que se trasmite por televisión en el canal nacional RCN participaron dos paisas cuya presentación consistió en una demostración de la dinámica del juego del trompo, estos antioqueños hicieron una muestra de las jugadas que se pueden realizar con este juguete. El trompo que utilizaron era de gran tamaño y de un material plástico. Al verlo, de inmediato recordé esos hermosos tiempos de mi infancia vividos en el poblado de Camarones, cuando con mis amigos practicábamos este juego. Este pintoresco pueblo es uno de los más cercanos a Riohacha (capital del departamento), de gente sana, recochera y mamagallista, aún carente de sitios de recreaciones y diversiones.
El origen del trompo es impreciso aunque se tiene conocimiento de que han encontrado algunos hallazgos de estos ejemplares hechos con arcilla, en la orilla del rio Éufrates (Babilonia). Pero a La Guajira llegó vía Europa debido a la influencia comercial que tenia con esta península.
Tradicionalmente los trompos han sido construidos con madera dura de forma cónica redondeada y con un pequeño trozo de la misma encima de su cuerpo, llamado cabeza y termina con un clavo o púa metálica afilado. Eran fabricados por artesanos que tenían oficios relacionado con la madera y también por el ingenio e inventiva de los niños de la época.
El juego consiste en enrollarlo con una cuerda o “pita”, comienzan por hacerle un nudo en la cabeza y después enrollar el cuerpo (la parte cónica) hasta llegar al clavo, después de este enrollo, hay que lanzar el trompo tirando hacia atrás del cordel. Este lanzamiento puede hacerse totalmente de pie o agachado, reduciendo el impacto contra el suelo, de la misma forma puede hacerse con la punta mirando hacia abajo o hacia arriba.
Una vez se ha desarrollado la técnica de hacerlo girar se pueden realizar diversos juegos, que resultan vistosos y divertidos, como son: el puente o teleférico, bailarlo en la palma de la mano, pico al aire, deslizamientos, lanzamientos, sacar objetos, “rompe trompos” este es de mayor dificultad. Una de las jugadas que más se popularizó en la región fue la de coger el trompo en el aire pero con la uña del dedo pulgar, por la cual se acuñó el dicho “cógeme el trompo en la uña”.
Sacar objetos, “rompe trompos” con estas jugadas se practicaba la puntería, que consistía en poner una “checa” o tapa de cerveza y gaseosa, en un círculo y apostar quien le pegaba o la sacaba de la circunferencia; en estas jugadas eran varios los participantes y los perdedores eran castigados por los ganadores. Al perdedor le tocaba poner el trompo para que lo golpearan con la punta del clavo que salía de su cuerpo y muchas veces eran destruidos. Desde entonces se recurrió a un tipo de madera dura y resistente a los golpes como: el puií, guayacán, guayabito, roble, canalete, cedro, trupillo, entre otros.

Recuerdo que las apuestas no se hacían en dinero; primero porque éramos muy jóvenes y segundo por el poco circulante del efectivo en el pueblo. Con el pasar del tiempo a alguien se le ocurrió la idea de darle valor a las cajetillas vacías de los cigarrillos extranjeros y nacionales como Marlboro, Kent, Kool, Parliament, Pielroja, entre otras. Para conseguir estas cajetillas vacías de cigarrillo nos tocaba viajar muchas veces a Riohacha y Maicao, a fin de poder obtenerlas y hacer las apuestas. Con la acumulación de estos dineros suplantábamos a un personaje adinerado de la región y nos hacíamos llamar como tal: MAURICIO “MORIS” DAES, JORGE “RETRA” ROMERO, LUIS “CHICHE” ROMERO, “CHOPY ROSADO”, DIOFANTE LUGO, RICARDO “CARCHI” HENRIQUE, RAÚL “RAUCHO” ROYS. En Camarones: MANUEL RODRIGUEZ, JACINTO “CHINTO” RODRIGUEZ, SALOMON ARIZA, NEFER ARIZA, NESTOR “EL NEGRITO” IBARRA y ALGEMIRO “ALGE” REDONDO.
Hoy día la tecnología y el comercio han desplazado este juguete tradicional, hecho manualmente con madera, por los juegos de computadores, televisores, videojuegos y artefactos electrónicos.